Me empiezo a acomodar en los primeros puestos de carreruchas populares. Ya son dos los podios que se me han escapao esta temporada por muy poco, pero lejos de sentarme mal, todo lo contrario, me han dado ambos una inyección de moral increible, y es que, aunque son solo carreras nimias con pocos participantes, lo importante es la mejora personal que he experimentado.
Cita ineludible de este año, y no por la grandilocuencia del evento, que creo que ha sido la carrera con menos afluencia que he corrido nunca, sino por ser donde es, en el pueblo de mi adolescencia, donde iba al instituto y me saltaba algunas clases, entre ellas la de educación física, para ir a jugar al futbolín.
Viejas amistades, aunque no haya visto a tantos como el año pasado, pero siempre es agradable salir y ver a los viejos amigos y conocidos, así como conocer a las nuevas generaciones, pero sobretodo, desconectar con mi gente, con mi familia que mas que nunca me están apoyando en este camino que he decidido recorrer en esta etapa de mi vida.
Bueno, la crónica es la siguiente:
Llego a Vélez Blanco el día antes, me sorprende que junto a mis padres y hermanos han venido también mis primas, cenamos y nos vamos a tomarnos algo, pero de relax, que si no se lía uno y luego a ver quién corre.
Al día siguiente me levanto, desayuno lo de siempre, nos ponemos pala en mano a trabajar en el huerto de la casa para poder organizar la barbacoa de por la noche, hemos montao un chiringuito que ni las jaimas del desierto. En ese momento recibo la visita de mi amigo Dani que llevaba un año sin verlo, y antes de eso 10 años sin verlo.
De comer: arroz, paella concretamente, luego un té y ese pedaso de marble Brownie que ha hecho mi tita Marga y que está que parte de rico.
Un pequeño amago de siesta y “pa´l Rubio”. Menudo calorazo, espero que salgamos tarde, porque si no lo voy a pasar mal. Recojo el dorsal y preparo las cosas, siempre hay algo que se te olvida y que te pone de los nervios en los últimos momentos, pero siempre se soluciona.
La family baja y comienzo a motivarme, nos tomamos un cafelito para subir pulsaciones y nos vamos a la piscina, que es uno de los encantos/singularidades de este evento, que permite al público ver todo el tramo de natación y lo hace emocionante, pero que para los triatletas es un poco una putada porque nos cruzamos unos con otros y a veces nos chocamos.
Salen los junior y los infantiles y nos toca el turno. Salgo justo en el centro de la piscina, y salgo a lo grande, poniéndome el primero en los 3 primeros largos, hasta que empiezo a tragar agua y me doy cuenta de que ese ritmo no puedo mantenerlo, así que voy bajándolo poco a poco y poco a poco me empieza a adelantar gente, pero este año hay una gran diferencia, y es que este año la gente no se me va tan fácil, me mantengo ahí y solo me sacan pequeña ventaja que luego puedo recuperar en mi parte fuerte que es la bici y la carrera a pie.
No hago muy buen tiempo, 11 minutos y medio, me sale a 1:40 los 100, que es lo que hago en los entrenos y que esperaba bajar un poco en carrera, pero weno…
Salgo un poco asfixiado, el 10º, y hago una transición penosa, porque el porta-dorsales tiene la cinta metida al revés y no se queda apretado, se abre y se me cae y con la bici cogida y todo no puedo apretarlo, decido montar y buscar el momento de arreglarlo ya subido en la bici y eso a la postre es peor, porque me hace perder mucho tiempo al principio de la bici al tener que guardar el equilibrio e intentar arreglarlo con una mano, pierdo por lo menos medio minuto, y he estado a punto de pegarme el ostión en la bici por esto, hasta me he dado un tajo en el dedo. Finalmente consigo hacerle un nudo y empiezo a escalar.
Me adelanta un tio que iba lanzadísimo y yo empiezo a adelantar gente, por lo menos 7 u 8, entre ellos Juan Abel que tiene mas o menos mi ritmo y es el objetivo a seguir, entonces decido tirar fuerte porque se que luego me puede alcanzar en la bajada porque ellos se la conocen muy bien y yo siempre pierdo bastante.
Me pasa Dani, como una bestia, aunque hago un amago de seguirle un poco pero luego tengo que dejarlo que se vaya, a la postre me quitará el podio por un minuto y pico.
Comienzo la bajada y tengo a uno delante pero no baja muy bien y en una curva se sale y le puedo adelantar, luego me pierdo varias veces, porque la señalización era escasa y en algunos puntos tenías que estar muy atento para no perderte, además hay varios sitios en los que me salgo y pierdo muchísimo tiempo, entonces me alcanza Juan Abel como bien había previsto y tras varios intentos infructuosos de dejarle atrás decido dejarle pasar y seguirle, ya que se conoce muy bien el trayecto y me va a venir bien seguir su trazada, y efectivamente, consigo avanzar mucho mas rápido y sobretodo no perderme, y es que estoy seguro que si no hubiera ido el delante me habría perdido en al menos 5 sitios, asi que hacemos una alianza muy buena y nos vamos relevando para que no nos alcancen por detrás, incluso en algún sitio me espera para que recupere el camino, porque me pierdo incluso yendo con el.
Así llegamos a la transición y decidimos jugárnosla en la carrera a pie.
La segunda transición rapidísima, salgo por delante de Juan Abel un par de metros, pero me encuentro muy mal, las pulsaciones tienen que estar por las nubes, y la respiración fortísima y a 2.
Mi family empieza a animarme muy fuerte, y es que voy 5º y el 4º va a 4 minutos, demasiados, pero Dani es ciclista y no corre bien así que si consigo imponer un ritmo fuerte, igual con algo de suerte…
Me da un poco de pena tirar y separarme de Juan Abel, en algún momento pienso en esperarle para que me siga y motivarlo un poco, pero luego pienso en que hay otro turno de corredores y quiero hacerlo lo mejor posible, así que me tiro para adelante, aunque lejos de dejarlo atrás, me sigue muy de cerca, sin embargo van pasando los kms y va cediendo metros, yo también he apretado aposta para que no me pille, pero siempre voy acojonao de que me haga un esprint y me pille, pero parece que va tan justo de fuerzas como yo, y poco a poco voy afianzando mi plaza, porque lo que es pillar al que va delante no lo voy a pillar, tenía demasiada ventaja.
La segunda vuelta se hace dura, pero lo peor es que durante la carrera a pie me amaga con dar flato, aunque consigo corregir la respiración para que no me de mucho. Sigo sufriendo y por fin llego a meta, en la meta me esperan todos, me caigo reventao al suelo, 5º de la general y 4º de mi categoría, se me vuelve a escapar el podio por un poquito, pero al igual que en la carrera de San Bernabé me da una inyección de moral impresionante, y es que el trabajo empieza a dar sus frutos, poco a poco empiezo a coger un ritmo que me permite estar ahí y sobretodo llegar a puestos importantes en las carreras, y eso me motiva a seguir y a afrontar el campeonato de España con muy buenas sensaciones.
Nos quedamos hasta la entrega de premios y nos vamos para casa, que ahora viene lo bueno, y la otra razón por la que hemos venido aquí, la recompensa merecida tras meses de duro entrenamiento.
Pedaso de barbecue niño! Morcillas, chorizos, longaniza, costillas, hamburguesas, venga que me lo inyecten en vena, evidentemente fue comerme 2 morcillas y un poco de ensalada y ya no podía mas, y cervecita, menudo espectáculo que montamos cada vez que nos juntamos los Manzano.
Luego un poquillo de relax jugando al Carcassonne y….
… Fiesta!!
Tocaba ya, pelotaso y hasta las 7 de la mañana, y es que de vez en cuando hay que vivir. Muchas risas y muchas tonterías y gilipolleces las que se nos ocurren, pero ¿y lo bien que nos lo pasamos? Pero por lo menos aguanté.
Y el día de resaca pues viendo las motos, el tour y de relax, y por supuesto hinchándose de comer, en este caso papas a lo pobre. En fin, un finde que esperaba hace tiempo y que he disfrutado mucho aunque no haya podido ver a los colegas que este año no han venido al pueblo todavía, pero he disfrutado como un crio, sobretodo en la carrera con toda la familia apoyándome.
Si he de seguir mejorando y si merece la pena esto es precisamente por ellos, por ver como se les llena el cuerpo de orgullo cuando me ven ahí sufriendo y por esos gritos de ánimo que solo ellos daban, ningún otro triatleta se ha sentido tan arropado como yo hoy, ni siquiera los locales, parecía que todo el público eran ellos, y es que eran los que realmente animaban y gritaban, y eso ha sido lo que me ha dado ánimos para ir a muerte sobretodo en la parte final, en la carrera a pie, lo que ha hecho que tire para adelante para decirles que gracias a ellos estoy ahí y que gracias a ellos seguiré mejorando para que un día puedan verme desde 40 centímetros mas abajo y con un trofeo en las manos.
El tiempo final ha sido 1:36:00 casi 7 minutos menos que el año pasado, una pasada teniendo en cuenta los fallos que he tenido y que no he nadado especialmente bien.
Anímicamente me encuentro muy bien, con ganas de afrontar el campeonato de España, un poco menos fino que antes de ponerme malo con la faringitis, pero ya completamente recuperado.
Así que ahora toca seguir entrenando porque viene lo mas gordo de la temporada, pero ya nada de series ni de entrenamientos excesivamente duros, ahora a hacer fondo y bajar la intensidad de los entrenos y sobretodo a entrenar la adaptación de bici a carrera, porque estoy seguro que si mejoro eso puedo explotar mi punto fuerte que es la carrera a pie.
Pero antes que nada gracias a mi family, a mis hermanos, a mis primas, a mis primos, a mis tios, a mis padres, a los allegaos, a mi vecino Blas, al mecánico de helicópteros, jajaja, a los camareros del punto, vamos, a todo el que se me ha cruzao este fin de semana, porque gracias a ellos me lo he pasao genial.
Y no quiero cerrar esta entrada sin acordarme del gran ausente de este triatlón, mi colega del instituto y antiguo compañero de piso en la universidad y nuevo compañero de triatlón, espero que te mejores pronto Berrio, ánimo y tómatelo con tranquilidad, que seguro que si haces las cosas bien ya mismo estamos corriendo juntos otra vez. Un abrazo a todos y Graciassss!
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